Tuesday, October 03, 2006

si pudiera soñar

la lluvia ya no caía ni por siacaso.
estaba pegado a la pared que, helada, me movía los pies de un lado a otro junto a la maldita gravedad.
recordaba las clases de mortalidad el invierno pasado, cuando habíamos aprendido que nos podríamos tropezar.
La pared se sentía frágil, y yo me tambaleaba con mis pies atados al techo.
iba y venía igual que un péndulo. no sé cómo llegué a quedar en esta posición pero lo había logrado.
luego de un rato tomé un cuchillo que estaba amarrado a mi cinto y me dejé caer sobre mi cabeza.
fue bastante doloroso, pero me puse de pie y me fui a duchar para ir al trabajo.

2 comments:

pd said...

sólo quería que supieras que sigo aquí, que te leo y te escucho, y te quiero y estoy contigo.
gracias por todo lo que me das, hoy particularmente gracias por presentarme a Leland.
gracias por regalonearme y quererme y soportarme, gracias por formar parte de mí, de lo que soy, de mi vida cotidiana, de mi familia.

jonás said...

sádico...
mi teoria es q a ese tipo le gustaba pasar noches con mujeres que abusaban de él, tanto asi que le gustaba que lo amarraran, de ahi lo sedaban y lo ultrajaban, el compadre se despertaba y no se acordaba de ninguna cochinada y se iba al trabajo como un ente normal que tiene que subordinarse a un weon pelao (sin ofender) que gana el triple de su sueldo.